Es una reflexión acerca de los siete textos que conforman, hasta hoy, la producción novelística de la autora y que la señalan como una presencia fundamental en el proceso de reinstalación literaria que lleva a cabo la España de los años ochenta. El tránsito descriptivo que aquí se revisa nos lleva desde la resonancia testimonial que evocan los primeros relatos, hasta el sólido manejo de otros formatos discursivos, para avanzar hacia la factura de los códigos tradicionales a través de la intervención metafictiva, el grotesco y la ironía. En las novelas de Rosa Montero comparece una mirada lúcida y crítica que indaga obsesivamente sobre la fugacidad del tiempo, la muerte, el amor, la escritura y que logra desvelar la sutil marca de las estructuras del dominio en el perfilamiento de las identidades, como en las formas sociales que asumen las relaciones entre hombres y mujeres. Así, Poder y Género, se constituyen en dos anclajes de sentido que otorgan unidad y trascendencia a este proyecto narrativo.
