Los padres de Marcos tienen miedo de que a su hijo le pase algo, así que no le dejan hacer nada. Lo único que le permiten es sentarse delante del televisor sin moverse y sin hacer ruido. De tanto estar así, Marcos se convierte en un muñeco.
Artículos relacionados
Vista previa: ESTATE QUIETO
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Puede obtener más información aquí o cambiar la configuración.