Holle es una lúcida viuda de ochenta y dos años, vive sola pero Laura, su nieta le pasa a visitar a menudo después del trabajo. Ella le cuenta historias de su juventud y Laura escucha atenta. Con su habitual ironía y una senzillez sólo aparente, la autora traza el acerado retrato de una época y unos personajes inmersos en una trama siniestra y mortal; una sombra cuyo mayor peligro es el miedo.