Hormigas con púa, humanos cornudos, tostadas de ratón y otros prodigios son algunas de las cosas que pueden encontrarse en el Museo de Tecnología Jurásica de David Wilson, un lugar asombroso en el West Side de Los Angeles, que familiariza a los visitantes con su innato sentido de la ma-ravilla haciendo que se pregunten cuáles de los objetos allí expuestos son reales.
La yuxtaposición de lo auténtico y lo fantástico inspira cada página de este irresistible libro. Porque en El gabinete de las maravillas de Mr. Wilson, Lawrence Weschler busca los ecos de los primeros museos, y se mueve entre la veracidad de la ciencia y la ficción del arte, a partir de citas literarias como las forjadas por el imaginario mundo de Borges o de Calvino. Este libro asombroso rinde homenaje a la voluntad y al empeño de quienes han dado rienda suelta a los caprichos de la mente.