Miguel de Unamuno acuñó el término de Intrahistoria para referirse a la existencia de aquellos ciudadanos que, pese a no haber realizado grandes obras en vida por las que ser recordados, sí resultaban ejemplares para el resto de sus coetáneos. Todos formamos parte de esta Historia en mayúsculas, pero hay determinadas personas que dejan una huella imborrable en todos nosotros. Éste es el caso de Melchor, un nonagenario de la provincia de Valladolid, de cuya historia se puede aprender mucho. Entre sus cualidades destaca su enorme entrega durante más de cincuenta años a la venta ambulante por diversos rastros de España, y particularmente el de su Valladolid natal, una ciudad que late y se transforma a lo largo de un siglo. La presente obra es un recorrido por la biografía de esta entrañable persona, que actualmente dedica su tiempo a estar con sus familiares y amigos más allegados, saboreando cada minuto de este día a día que palpita en su corazón y en su alma. Melchor transmite con sus historias y sus palabras esa extraña magia que nos acerca un poco más a la verdadera esencia de la vida.
