Las fotografías de Benigmo Bollo nos muestran un paisaje muy próximo, ahí mismo, a unos minutos del centro urbano, tan cerca, que no lo valoramos suficientemente. Y merece un recorrido, una mirada atenta, como la que nos acerca a través de la fotografía de este libro. Las connotaciones realizadas por Ángel María de Pablos en los textos evidencia el resto de la imagen lo que no aparece en la foto de forma referencial y, sin embargo, la foto sugiere: los aspectos religiosos, míticos, el psicoanálisis, el inconsciente... es decir, lo que la fotografía hace pensar al lector.