Los 70 y los 80 fueron años ricos en cambios y experiencias: políticas, sociales, sexuales y familiares. Y de nostalgia y amargura para quienes los vivieron con intensidad. Nunca hasta entonces, la mujer tuvo la oportunidad de vivir tantas conquistas y tantos desengaños en tan poco tiempo. Teresa, la protagonista de la novela, es una mujer procedente de un pueblo andaluz, que estudia en la capital y vive una época agitada, llena de matices: felicidad, desdicha, grandes tensiones y contradicciones.
La novela comienza con un intento de suicidio de la protagonista. En el hospital, Teresa repasa lo que ha sido su vida, en el pueblo, su llegada a Madrid, la Universidad, sus primeros contactos políticos y, sobre todo profundiza en sus relaciones personales, de amistad y de amor a lo largo de su vida. Cuando se encuentra con Pablo en París se enamora de manera incondicional de un atractivo manipulador y arribista que, poco a poco, va minando su voluntad y su capacidad de decisión y del que sólo dejará de depender para poder discernir libremente, al final de un largo año en que transcurre la acción: entre el 84 y el 85.
Un año, una vida, es una novela de sentimientos, de amistad, de ternura, de pérdidas, de recuperación y de pequeñas traiciones. Y es una ocasión para que Teresa se haga fuerte, saque su yo más egoísta, tome las riendas de su vida, y comience a caminar por la senda del desencanto, el desamor, la dureza de sentimientos y la soledad
Es, además, un homenaje a las personas que vivieron aquellos atribulados años y a sus lugares comunes.
