Un locutorio atestado de voces, un and+®n de Metro desierto, un gui+¦ol en el Paque del Retiro o una cueva prehist+¦rica: cualquier marco es v+¡lido para narrar una historia de amor. Incluso las p+¡ginas de un diccionario. Carlos Salem muestra en este libro diferentes registros de su estilo: el humor irreverente en unos relatos, el lenguaje directo o la prosa en espiral en otros, y en todos un fondo de ternura po+®tica que el autor se niega a reconocer, "porque uno tiene una imagen de duro que proteger". Esta colecci+¦n de relatos nace de un desaf+¡o. Y tras aceptarlo, Salem comprob+¦ que sus cuentos preferidos o los que m+¡s le apetec+¡a escribir, ten+¡an mucho que ver con el amor. Como dice el autor en el relato que da t+¡tulo a este libro: "Yo tambi+®n puedo escribir una jodida historia de amor. S+¦lo hay que rebuscar en mi propia vida, cambiar nombres y finales. Sobre todo finales."
Un locutorio atestado de voces, un andén de Metro desierto, un guiñol en el Paque del Retiro o una cueva prehistórica: cualquier marco es válido para narrar una historia de amor. Incluso las páginas de un diccionario.
Carlos Salem muestra en este libro diferentes registros de su estilo: el humor irreverente en unos relatos, el lenguaje directo o la prosa en espiral en otros, y en todos un fondo de ternura poética que el autor se niega a reconocer, "porque uno tiene una imagen de duro que proteger".
Esta colección de relatos nace de un desafío. Y tras aceptarlo, Salem comprobó que sus cuentos preferidos o los que más le apetecía escribir, tenían mucho que ver con el amor. Como dice el autor en el relato que da título a este libro: "Yo también puedo escribir una jodida historia de amor. Sólo hay que rebuscar en mi propia vida, cambiar nombres y finales. Sobre todo finales."