La importancia del cultivo de la vid en España es evidente, ocupando en el orden internacional el primer puesto entre todos los países de producción vitícola, con una superficie que representa el 15 por 100 de la total dedicada a dicho cultivo y el 23 por 100 de la que corresponde a Europa. La tipicidad y calidad de los vinos españoles en el mercado mundial se ha hecho patente en los últimos años, debido en parte al esfuerzo realizado por el sector, y a la tecnología aplicada en nuestros viñedos y sus producciones. Esta obra recoge con fidelidad esta favorable situación, en un completo "Tratado de Enología" de gran envergadura, llenando un vacío, después de un paréntesis de varias décadas, dejado por el insigne Enólogo y maestro de maestros Juan Marcilla Arrazola. La estructura de esta obra se desarrolla de forma lógica y ordenada, desde la maduración de la uva, hasta el acondicionamiento de los mostos o vinos para su comercialización; destacando principalmente algunos aspectos como el necesario conocimiento de la Viticultura en la elaboración de los vinos, la armonización de la tecnología entre las escuelas europeas y la de los países emergentes, con una especial atención a la influencia de la maquinaria e instalaciones en la calidad de los vinos, y por fin al respeto que la Enología actual debe tener hacia el medio ambiente.
